Un mapa de generaciones para abordar nuestra cultura
A medida que la esperanza de vida fue aumentando, ha sido posible que cinco e incluso seis generaciones vivan juntas al mismo tiempo, con un aprendizaje, una cultura y unos mandatos completamente diferentes.
Con el propósito de ampliar los conocimientos sobre las diferentes generaciones que conviven en la actualidad, vamos a recorrer sus características distintivas con ayuda de un mapa de sistemas.
Sistema de generaciones
Una generación es una manera de agruparnos y mirar lo común, lo que nos une. Hay eventos comunes que ocurren y que marcan la vida cotidiana y nos permiten identificarnos con el otro. Cada generación tiene sus características particulares, su propia forma de ser. Cada una está marcada por algunos mandatos del género, por su ciclo de vida y por la tecnología entre otros.
Tradicionalmente, hemos clasificado a las generaciones cada veinte años aproximadamente, marcadas por ciertos eventos sociales, políticos e históricos comunes. Hoy los tramos etarios de clasificación se están acortando y básicamente son determinados por «el uso de determinada tecnología», como afirma Roberto Balaguer. Asimismo, los nombres con los que las diferenciamos, algunos provienen de Estados Unidos, por los que podemos encontrar algunas diferencias con los eventos que han marcado a cada generación en lo que respecta a Latinoamérica.
En el siguiente cuadro podremos tener una idea clara de los nombres, épocas y principales intereses de cada una de las cinco generaciones principales:
¿Cómo describimos las generaciones?
Comenzando por las personas nacidas antes de 1945, desplegaremos los rasgos de cada generación. Desde el Coaching podemos acompañar mejor a nuestros coachees si conocemos sus intereses principales y los eventos destacados que marcan su visión de mundo, comportamientos, ideas o perspectivas.
Generación silenciosa
La generación silenciosa está compuesta por los bisabuelos de los más jóvenes, los abuelos de la generación X y los padres de los baby boomers.
La llaman «silenciosa» porque es la generación de la guerra y posguerra, evento que, aunque lejano para los latinoamericanos, nos golpeó con fuerza. Había que trabajar «callados» porque se tenía que salir adelante. Fue una generación dura y sacrificada.
Actualmente existe mucho abandono de este grupo etario en todos los niveles socioeconómicos. Estamos en una etapa donde se asocia la vejez con ser un estorbo y no un aporte, pues vivimos un culto a la juventud. Los ancianos y las ancianas sienten que están de más y que son tratados como superfluos. Creo que es una generación perdida y relegada.
La relación con la tecnología es precaria, por no decir ausente. Con el teléfono celular, por ejemplo, ha sido una bendición para algunos y una maldición para otros. En mi experiencia puntual, mi madre, a pesar de que tenía todas las condiciones mentales para hacerlo, por su ceguera parcial nunca pudo tener un teléfono moderno. Muchas veces la tecnología los aísla como generación.
En síntesis, es un grupo que ha tenido que hacer demasiados sacrificios y se ha empobrecido. Les ha costado adaptarse a los tiempos y a la velocidad de los cambios.
Baby Boomers
Los Baby Boomers son los hijos de la generación silenciosa, madres/padres de la generación X y Millenials (Y), y abuelas/os de la generación Z.
Es una generación poderosa, expansiva, que vibró con los idealismos y también sufrió con sus derrumbes. Hemos vivido todo el espectro de la ilusión y la desilusión de mucha luz y sombra oscura. No puedo dejar de destacar el largo período de vivencias de dictaduras en casi toda Latinoamérica, que coincidió con nuestra etapa de madurez y crecimiento. Normas, miedo, autorrepresión y el poder centrado en el autoritarismo. Así como vivimos la expansión en la juventud, vivimos la decadencia en la madurez, en dictadura.
En la actualidad, esta generación está viviendo una etapa caracterizada por la “planificación de su retiro”, el final de la vida laboral tradicional. Al mismo tiempo, parte de esta generación está al comienzo de una nueva vida laboral productiva, reinventando nuevos espacios de trabajo, en su mayoría de manera autónoma, ya sea por necesidad o por vigencia.
Es la generación de las separaciones y divorcios. Abundan las viudas principalmente y los nuevos emparejamientos. Al mismo tiempo se trasladan a vivir con hijos o hijas para el cuidado de los nietos, y para ayudarse mutuamente en lo económico. Es la generación que se encargan de cuidar de sus padres y madres ancianos y, al mismo tiempo, aparece la evidencia del desgaste del cuerpo y la salud, y la inminencia de sus muertes. Hay mayor conciencia de la finitud de la vida y surgen cambios en el concepto del tiempo.
La generación baby boomer tiene la posibilidad de ejemplificar una manera diferente de envejecer. Se trata de un envejecer activo y propositivo, diferente a la «marginalidad» y «exclusión» a la que la «modernidad» impulsa.
Generación X
La Generación X se compone por los hijos de los Baby boomers, hermanos de Millennials, y también padres/madres de Millenials o de la generación Z.
La generación X está influida por los primeros divorcios de sus padres. Han vivido lo bueno y lo no tan bueno de las familias ampliadas, así también como de sus desmembramientos. Han sido testigos de una época de ruptura de la base de la estructura familiar existente.
Es una generación atenta a buscar el logro, a querer que le vaya bien y a esforzarse, con maternidades y paternidades tardías, que se abren a preguntas que no se hacía la generación baby boomer, como: «¿quiero tener hijos o no?»
El grueso de la gente que se dedica al coaching pertenece a esta generación, que es la que está consolidándose. Es una generación muy sacrificada y acelerada. Quieren ser buenos padres y buenas madres, excelentes profesionales, ganar dinero, consolidarse, pasarla bien, viajar, ser buenos amantes.
Mi experiencia con la sexualidad de esta generación es que son personas que no tienen tiempo e incentivo para el sexo. Incluso se observa que no hay deseo sexual en parejas que han estado casadas durante años. Llegan a sus casas y quieren dormir. Hay tantos desafíos en el mundo que el individuo se sitúa en otro lugar. Están viviendo, entonces, el esfuerzo de la multiplicidad de roles para cumplir lo mejor que pueden con lo que les corresponde.
Generación Y (Millennials)
Los miembros de la generación Y, también conocidos como Millennials, son los hijos de la Generación X, mayoritariamente.
Es la juventud de hoy. Admiro de esta generación ese lado fresco y libre. Son inconformistas, exigentes, cómodos, autorreferentes, dispuestos a trabajar en lo que les gusta, con ganas de crear y gozar, optando muchas veces por el goce antes que por el deber. Es una generación innovadora, atractiva y, también, resistida.
Es la primera generación nativa de lo digital y nos está mostrando caminos. También es la generación de la apertura, de la inclusión sexual y racial. Es interesante mirarla y creo que estamos aprendiendo de ella en este sentido.
Quieren ser ciudadanos y ciudadanas del mundo y, después de trabajar dos años, se van de viaje. Sienten que tienen el mundo en sus manos y quieren explorarlo en profundidad. Cuando se cansan, viajan hasta que se les acaba el dinero y luego improvisan lo que viene después.
Si bien es una generación consentida y cómoda, también es generosa con lo que sabe. Además, a diferencia de la generación anterior, tiene mucha autoestima. Por lo tanto, actualmente es la generación que más se divierte consigo misma. Hay una especie de individualismo en ellos que juega un poco en contra en la esfera social. Al mismo tiempo, apuestan por el trabajo en equipo, por el coworking. Hay una parte colectiva que es muy relevante. Esta generación representa el aquí y el ahora. Hay una sabiduría básica en ese punto que considero que tiene que ver con la rapidez. Hay algo anticipatorio en sus formas, esencial en los tiempos que vivimos. Igualmente se manifiesta en parte de esta juventud, un sin sentido básico, que muchas veces derivan en depresiones y adicciones.
Generación Z
Los miembros de la generación Z son hijos de la Generación X y de los Millennials, además nietos de los baby boomers.
Es la generación de mis nietos y nietas adolescentes, nativos digitales junto con los millennials. Todavía tenemos poca prospección, pero les va a tocar el cambio total. Todo lo que hoy en día tenemos, como las profesiones que ejercemos, en su gran mayoría no va a existir cuando esta generación llegue a la adultez.
Esta generación está muy comprometida con ciertos temas como la salud y el medio ambiente, y van de la mano con el amor por los animales. Sufren por el hecho de que los animales se extingan, por el hoyo en la capa de ozono, por el humo de las quemas, por el consumo de cigarrillo.
Parece que no van a tener un mundo fácil, a menos que las generaciones adultas y las instituciones ofrezcamos la compañía que requieren. Como las profesiones que hemos inventado no les serán útiles, no tenemos otra opción que crear nuevas o esta generación tendrá que ocuparse de ello. La realidad es que todavía no sabemos mucho acerca de esta generación.
Beneficios de entender este mapa
¿Por qué necesitamos comprender cómo son las distintas generaciones? ¿De qué nos sirve entender que, más allá de las categorías y de los nombres elegidos, los latinoamericanos tuvimos vivencias y experiencias particulares?
Nuevamente, todo tiene que ver con esta invitación a ampliar la mirada. Los beneficios están a la vista. Con las generalizaciones y excepciones siempre presentes, el mapa de las generaciones nos puede ser útil a quienes hacemos coaching para acompañar coachees hombres y mujeres a comprender el mapa cultural en el que se mueven y, además, el mapa de sus pares.
Necesitamos sentir que no actuamos en soledad, que me constituyo en un otro. Comprender la cultura y el lugar en el que estamos, entender nuestra propia historia, nos permite echar un vistazo a nuestro ser y estar en el mundo desde un lugar al que pertenecemos, junto a los demás.
Esto también influye en la responsabilidad: lo que hacemos no es ajeno a nuestro entorno. Todo es parte de algo, toda energía constituye una energía colectiva. Por ello, salirnos del «pequeño yo» y poder mirarnos en un espacio interdependiente nos permite ser más sanos, más responsables, dejar de culparnos tanto y entendernos mejor.