¡Cuando las personas mayores despliegan las alas!

Tuve la oportunidad de asistir a una expresión artística entretenida y novedosa hecha por un grupo de personas mayores con participación intergeneracional, bajo el alero de la Fundación Gerocultura. 

Una obra de teatro, con ingredientes creativos e innovadores. La obra consistió en la representación de 4 cuentos:

  • Con la consciencia del tiempo

  • No estamos desconectados ni dormidos, estamos en otra

  • No podemos cambiar el viento, pero si ajustar las velas

  • Reconoce mis alas

Tenía un formato tipo cuento infantil, que va evolucionando de un cuento a otro, con mensajes simples, directos y profundos sobre lo que traemos, tenemos, aportamos las personas mayores, así como su energía, lo lúdico, el humor, el canto, el baile.  

Un primer ingrediente innovador que supimos detrás de bambalinas, la obra es (el ser) móvil, es decir, que cuentan (son) con todos los recursos básicos para ser representada en cualquier escenario adonde les inviten. Para ello esto requiere que sean simples, desarmables, fáciles de transportar, tales como la escenografía y la utilería de cartón, telas semi transparentes para los diferentes efectos especiales, entre otros. Lo más sofisticado fue la música, las luces de colores y la proyección en un fondo de cartón creada para la representación y por supuesto la puesta en escena de sus múltiples protagonistas. 

Varias cosas me llamaron la atención de la labor artística colectiva: 

  • Genera cohesión y sentido de pertenencia. Una de las artistas mayores, reportó que a sus compañeras las conoce por su nombre de pila, y no necesita más para ir dos veces a la semana a encontrarse con ellas y ellos a ensayar, entusiasmada y feliz de pertenecer y sentirse parte importante. 

  • Genera creatividad siendo mayor que la suma de las partes. Un buen ejemplo son los textos, ya que además de ser desarrollados por el grupo, estaban hecho en verso… sin el mayor esfuerzo (¡Ups! ¡Me contagié!), que le daban una liviandad y ritmo especial, lo que mantenía nuestra atención permanente. 

  • Otro elemento que a mí parecer se llevó el premio mayor, fue que los textos eran doblados, siendo modulados sincrónicamente, casi perfectos, siendo difícil distinguir si en realidad eran ellos y ellas las que estaban hablando. Es un recurso fenomenal, que le quita tensión a los artistas y al público, de un posible y muy posible olvido del libreto. 

Por último, al final de la obra, se abrió una conversación con el público, para preguntas, reflexiones e impresiones y quienes participaron mayoritariamente fueron los jóvenes, desde la admiración, el respeto y la curiosidad.

La creatividad, la sinergia del equipo, el sentido de pertenecer no tiene límite de edad, aportando sentido y amor por la vida, una sinapsis con poder transformador.

¡Gracias por esta experiencia!

Ana María Torres, coach.

www.anamariatorres.com

anitato10@gmail.com

Instagram: @anamariatorrescoach

Para saber más de esta fundación y sus procesos creativos con equipos intergeneracionales referirse a:

 www.gerocultura.cl

hola@gerocultura.cl

Instagram: @gerocultura

Pamela Zahler